El sensor LinX CGM tiene un diámetro de 22 mm, una altura de 4.2 mm y pesa solo 2.2 gramos, lo que lo hace liviano y discreto para el uso diario.

Sí, el LinX CGM es resistente al agua (IP68), lo que garantiza un rendimiento confiable incluso durante nadar y ducharse. Continúa funcionando perfectamente cuando está sumergido hasta 1.5 metros durante 30 minutos, lo que te permite mantener un estilo de vida activo sin preocupaciones.

Las áreas recomendadas para la aplicación del sensor LinX CGM son la parte posterior del brazo superior o el abdomen.

Lava el área de aplicación con agua y jabón, sécala completamente y luego límpiala con toallitas con alcohol. Asegúrate de eliminar cualquier residuo aceitoso, ya que puede afectar la adherencia del sensor.

Primero, quita la tapa del aplicador del sensor. Luego, alinea la abertura del aplicador con el área elegida de la piel, presiónalo firmemente y activa el botón de inserción del aplicador.

Sí, el LinX CGM es compatible con la bomba de insulina Equil. Permite la comunicación directa para un sistema completamente cerrado, ayudándote a gestionar tu diabetes con una integración perfecta entre el CGM y la bomba.

No es necesario calibrar el LinX CGM, pero se permite hacerlo si es necesario.

El LinX CGM proporciona lecturas de glucosa en tiempo real cada minuto.

El sensor LinX CGM tiene una vida útil de 15 días antes de necesitar ser reemplazado.

Sí, el LinX CGM permite compartir los datos con hasta 50 seguidores a través de la plataforma de gestión de datos Pancares.

El LinX CGM viene con seis alarmas totalmente personalizables, que incluyen alertas de glucosa baja, glucosa en caída rápida, ... y alertas de glucosa crítica baja. Puedes personalizar estas alarmas según tus umbrales de glucosa para un manejo óptimo.